La Propuesta Abierta para un Programa Común Progresista que presentó Pedro Sánchez este martes para conformar un Gobierno en España recoge, en su punto 3, aquellas medidas relacionadas con la emergencia climática, la transición ecológica de la economía, la agricultura y la pesca.
La primera de ellas —una declaración de emergencia climática en el país— fue una de las principales demandas que hicieron las organizaciones y colectivos ecologistas y por el clima en la reunión que mantuvieron el pasado 5 de agosto con Pedro Sánchez y la ministra en funciones para la Transición Ecológica, Teresa Ribera.
Unidas Podemos también incluyó la aprobación de la declaración de emergencia climática en la propuesta de coalición que envió al PSOE el pasado 20 de agosto.
En el mismo punto en el que se explica esta medida, se recoge también “el refuerzo del derecho al medio ambiente contemplado en el artículo 45 de la Constitución, incorporando la consideración de los “límites planetarios” como garantía de un progreso duradero y justo, y definiendo el acceso al agua potable y a la energía como servicios de interés general“.
En este sentido, el PSOE también incluye en su documento la revisión, actualización y desarrollo del Libro Blanco de la Educación Ambiental y el impulso de una Ley de Cambio Climático y Transición Energética, así como la implementación del Plan Nacional Integrado de Energía y Clima y la Estrategia de Transición Justa y una Estrategia de Pobreza Energética.
Si bien en la presentación del documento, el punto 256 incluía la prohibición, a partir de 2040, de la venta de turismos y vehículos comerciales ligeros con emisiones directas de dióxido de carbono, poco después el PSOE reculaba. Finalmente, en este apartado puede leerse lo siguiente: “En desarrollo de la estrategia de descarbonización a 2050, adoptaremos las medidas necesarias, de acuerdo con la normativa europea, para que los turismos y vehículos comerciales ligeros nuevos, excluidos los matriculados como vehículos históricos, no destinados a usos comerciales, reduzcan paulatinamente sus emisiones, de modo que no más tarde del año 2040 sean vehículos con emisiones de 0gCO2/km”.
En este capítulo, sobre Transición Ecológica de la Economía, el PSOE también presenta otras medidas para la descarbonización y se fija como objetivo el uso de energía 100% renovable para 2050, que en 2040 ya deberá ser del 85-95%. Un Plan de Reforma del Sistema Eléctrico, un Plan de Vivienda Sostenible, una Ley de Movilidad Sostenible, la financiación del transporte público o la reforma para que municipios de más de 50.000 habitantes delimiten zonas de bajas emisiones son otras políticas propuestas en esta línea.
En cuanto a la gestión del transporte aéreo, en un momento en el que algunos países europeos —Francia y Alemania— han anunciado ya la aplicación de ecotasas en los billetes de avión, el PSOE dice lo siguiente: “Garantizaremos que la gestión del Sector Aéreo sea en interés y beneficio general”.
La actualización de la Ley de Costas “ante la amenaza real que supone el cambio climático” es otra de las medidas que recoge el documento. También se habla de “la salud de los océanos”: “Reduciremos el uso de plástico y se impulsará la lucha contra la pesca ilegal, no regulada, no documentada, así como la ampliación de las áreas marinas protegidas y la trazabilidad de los alimentos procedentes del mar, para fomentar la pesca sostenible”.
Reducir la huella ecológica del turismo también está entre las propuestas, así como mejorar las condiciones laborales de sus empleados.
Puedes consultar la Propuesta Abierta para un Programa Común Progresista al completo aquí.
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