España debe invertir un 3,2% más de su PIB para cumplir sus objetivos climáticos

El Instituto Rosseau propone introducir un impuesto a la carne "producida de manera intensiva" y subvencionar los alimentos orgánicos. Su último informe indica que el país necesita destinar 2,9 billones de euros de aquí a 2050 para alcanzar la neutralidad climática.
Macrogranja de cerdos. Foto: Environmental Protection Agency

España necesita triplicar el gasto público destinado al clima, pasando de 18.000 a 50.000 millones de euros, y “canalizar” un 3,2% adicional de su PIB para “desbloquear los beneficios de la transición”, según un estudio europeo publicado hoy por el Instituto Rousseau.

“Se necesita una inversión total de 2,9 billones de euros de aquí a 2050 para situar a España en la senda de la neutralidad climática y mantener la competitividad a medida que el mundo transita hacia la neutralidad neta”, señala el estudio, que analiza también Francia, Alemania, Italia, Países Bajos, Polonia y Suecia.

El informe titulado La carretera hacia el cero neto. Superar la brecha de la inversión verde señala que para alcanzar sus objetivos climáticos, España necesita hacer “esfuerzos sustanciales para ampliar la red ferroviaria y la infraestructura de movilidad flexible” y recomienda que aumente la inversión pública en transporte en 9.000 millones de euros al año.

Impuesto a la carne

Lo especialistas también proponen introducir un impuesto a la carne “producida de manera intensiva” y dedicar esos ingresos fiscales para “compensar a los criadores afectados” y “financiar reducciones de precios para los alimentos orgánicos y extensivos”.

El estudio propone también apoyar con fondos públicos la conversión de la flota de tractores a vehículos de bajas emisiones y el uso de biogás, así como reducir los precios de los alimentos “orgánicos” para que sean asequibles para la mayoría de la población y proteger el mercado europeo de “importaciones baratas”.

El Instituto Rousseau dedica también un capítulo a la agricultura, en el que aboga por una conversión del sector hacia prácticas sostenibles que potencialmente reducirían la producción pero sólo de manera “insignificante” y que garantizan “una producción suficiente para alimentar a toda la población de la UE y satisfacer las necesidades clave de exportación de lácteos y trigo”.

En el caso de España, que cuenta con el 15% de la superficie agrícola de la UE, el informe destaca que proporcionalmente dedica menos apoyo público a la conversión hacia la agroecología que países con menos cultivos como Italia o Alemania.

Mayor inversión europea

En el conjunto de la UE, ese laboratorio de ideas estima que hasta mitad de siglo se necesitarán invertir 40 billones de euros para cumplir los objetivos de descarbonización del sistema productivo y canalizar, de media, un 2,3% adicional del PIB de la UE a ese área.

El gasto público en los Veintisiete para financiar la descarbonización debería multiplicarse por dos y pasar de 250.000 a 510.000 millones de euros al año, según los autores del estudio presentado este martes en Bruselas.

“Las cifras pueden parecer significativas, pero invertir en la transición verde es una medida financiera inteligente, que representa una fracción de lo que los gobiernos de la UE desembolsaron para la recuperación de covid-19 y los subsidios a los combustibles fósiles”, día declarado el director del estudio, Guillaume Kerlero de Rosbo.

Los autores del análisis, realizado con el apoyo del grupo de Los Verdes del Parlamento Europeo, recomiendan que las reformas en curso de las normas fiscales de la UE excluyan las inversiones en descarbonización, como el transporte limpio y la renovación de edificios.

“Es hora de que los gobiernos europeos pongan su dinero en práctica y den prioridad a la inversión pública para afrontar la transición verde”, declaró el eurodiputado y presidente de Los Verdes, el belga Philippe Lamberts.

Gracias a la colaboración de nuestra
comunidad podemos publicar. Ayúdanos a seguir.

COMENTARIOS

  1. Hartos de pagar impuestos para subvencionar a todo hijo de vecino. Si le pones impuesto a los productores, lo acabamos pagando los consumidores. Y subvencionar maquinaria que la pague el propietario.
    Yo cuando necesito comprar algo para vivir, no me lo subvenciona nadie, y con mi sueldo, no con los beneficios, que no tengo.
    Que paguen los que quemaron y destrozaron el planeta ,para obtener pingües beneficios.

  2. Suena a locura todo esto.
    Billones de euros!!!!
    Mejor desmontar las ciudades para “reiniciar” la vida humana en consonancia con madre naturaleza.
    Aunque creo que ya es tarde para tomar con(s)ciencia.
    Siempre seremos y serán un@s poc@s l@s que tengan conciencia y consciencia con una vida más armoniosa y aún así llegamos al campo con proyectos individuales y es muy difícil volver a ser comunidades coherentes.
    Pobres animales.
    Pobre naturaleza.
    Pobres de nosotros.
    Porque todo tiene un límite y el dinero no soluciona ni la consciencia ni la conciencia.
    Y el planeta es limitado.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.