Compartir:
Queralt Castillo Cerezuela
Este lunes 15 de junio, European Wildlife, una organización que lucha por la preservación de los animales salvajes en Europa y la diversidad biológica en el continente y por frenar el impacto climático en la naturaleza, enviaba una nota de prensa importante a los periodistas. Se trataba de una buena noticia de las que no suelen haber últimamente: la Adonis Azul, una mariposa que en el pasado había poblado los pastos del viejo continente, había sido avistada de nuevo tras más de cincuenta años. La última vez que la vieron fue en 1967. Una buena noticia, sin lugar a dudas.
El descenso de la población de algunas especies y su extinción final no es un fenómeno nuevo, pero sí hay la sensación de que cada vez se habla menos del tema. Quizás porque durante los noventa, parte de las clases sobre ecología y cambio climático iban orientadas a aprender sobre orcas, pandas y demás animales exóticos cuya población disminuía sin aparente solución.
Quizás por este motivo Brian James haya creado una de las plataformas interactivas virtuales más estimulantes de la red: Species in Pieces. Nada de extensas páginas de Wikipedia con tecnicismos, nada de dibujos infantiles, nada de elucubraciones con tintes académicos. Una página web que funciona como un museo virtual que te coge de la mano y te lleva por 30 especies en peligro de extinción. Pocos datos, algunos vídeos y enlaces a organizaciones que luchan por su preservación.
Pretende ser esta iniciativa un canto a la biodiversidad y la necesidad de luchar por su preservación. 30 animales, algunos más conocidos, como el lince ibérico, otros menos, como el avestruz somalí; en todo caso, animales que por unas causas o por otras (caza furtiva, pérdida de hábitat a causa de la acción de las personas o a causa del cambio climático, problemas de supervivencia por la desaparición de otras especies, etc.) están desapareciendo de la faz de la tierra sin dejar apenas rastro. La intención de la muestra virtual es educar, inspirar y provocar una reflexión; sin lugar a dudas, una buena manera, en estos tiempos complejos que corren, de dejar a un lado nuestro ombligo y mirar que pasa a nuestro alrededor.
Una de las especies que se pueden ver en la muestra digital es el cálao bicorne, de la familia de los bucerótidos, unas aves tropicales de gran pico cuya supervivencia se muestra pesimista. A finales de 2015, estuvo a punto de desaparecer hasta en tres ocasiones. Se encuentra en las selvas del noreste de India, Indochina en Malasia y en Sumatra (Indonesia), y uno de los motivos de su desaparición es la caza furtiva. Su pico es totalmente sólido y rico en marfil.
La desforestación y la caza se encuentran detrás de la desaparición de población del cálao y la recuperación de la especie se presenta complicado dadas las bajas tasas de reproducción de este animal. Aquí podéis saber más sobre él y cómo contribuir a su preservación.
Otro animal que se puede ver en la muestra virtual es el panda rojo, que tiene una población estimada de unos 2.500 ejemplares, distribuidos en los bosques de Himalaya. Como el cálao, la destrucción de su hábitat, así como la caza furtiva, son los principales motivos de su desaparición. La Red Panda Network se ocupa de su preservación y lucha por la conservación del entorno; un entorno que ha visto como la presencia humana se doblaba en el último siglo, al tiempo que los ejemplares de este animal descendían un 40% en los últimos cincuenta años.
Algo parecido le ha pasado al rinoceronte de Sumatra, pero su caso es quizás aún más grave: un descenso de la población del 50% desde la década de los noventa. Un 80% en los últimos 20 años. ¿El motivo? La caza furtiva en busca de un cuerno que en el mercado negro vale miles de dólares y la deforestación a la que se están viendo sometidos los bosques indonesios. Aquí puedes encontrar un poco más de información sobre este animal majestuoso.
Si de Sumatra viajamos a una de las islas más paradisiacas del Pacífico, Fiji, encontramos la iguana crestada de Fiji, una especie descubierta en 1979 y de la cual se han identificado unos 6000 ejemplares. La pérdida de terrenos de playa a causa del cambio climático y el desarrollo de un turismo poco sostenible en la isla están detrás de la desaparición de la colorida iguana crestada.
De vuelta a Asia continental es destacable el caso del mochuelo de Blewitt, visto por primera vez en 1873 y por última vez en estado salvaje en 1884. Después de considerarse extinto, se redescubrió de nuevo en 1997. En su caso, además de la deforestación, detrás de su desaparición, están los incendios forestales y los problemas que se derivan, como la alteración de la cadena de alimentación. Se calcula que hay de 70 a 400 ejemplares, repartidos por India central. Una curiosidad: a diferencia de otros mochuelos o búhos el mochuelo de Blewitt es un ave diurna, que aprovecha las horas de sol para cazar y alimentarse.
¿Y sabías que los huevos del avestruz somalí son usados con fines religiosos, como contenedores para acumular agua o como objeto decorativo? Este es uno de los motivos por los cuales esta especie también está en peligro de extinción. Esta especie también es cazada de manera ilegal con el fin de conseguir sus plumas o para alimento.
Estos son tan son algunos de los animales que se pueden encontrar en el museo virtual, que, por cierto, es muy recomendable para niños y adolescentes, gracias a una plataforma interactiva que resulta fácil de manejar, intuitiva y atractiva.
Si os ha gustado la muestra interactiva y queréis echar un cable, además de colaborar con las asociaciones que se proponen en la web, podéis comprar este print, disponible en diferentes tamaños, con los dibujos de todas las especies. Todos los beneficios van destinados a la preservación de las especies que se muestran en la exposición online.
Con el apoyo de:
Con la colaboración de:
MásPúblico sociedad cooperativa. Licencia CC BY-SA 3.0.
Política de privacidadDevoluciones y reembolsosUso de cookies
