Las emisiones procedentes de la generación de energía no aumentaron durante 2019, según nuevos datos de la Agencia Internacional de la Energía (AIE). En total, el sector emitió 33 gigatoneladas de gases de efecto invernadero, después de dos años de crecimiento.
El Director Ejecutivo de la agencia, el economista turco Fatih Birol, se ha mostrado esperanzado de que hayan tocado techo. «Tenemos que trabajar duro para asegurarnos de que 2019 sea recordado como el pico definitivo de las emisiones globales, y no otra pausa en su crecimiento», afirmó Birol. «Tenemos las tecnologías para hacerlo, y tenemos que usarlas todas», añadió.
Birol apuntó al descenso del uso del carbón en el primer mundo como principal causa del estancamiento de las emisiones. Los descensos en Estados Unidos (3%), Europa (5%) y Japón (4%) compensaron, según la AIE, el ascenso de las emisiones en otros países. «En el resto del mundo, las emisiones aumentaron en 400 millones de toneladas», afirmó, señalando que el 80% de ese aumento procedió de países asiáticos donde la producción de energía a partir de carbón todavía está en ascenso.
¿Crecimiento sin emisiones?
La agencia resaltó que la contención de las emisiones se dio en un momento de crecimiento económico: el PIB mundial creció un 2,9% el año pasado. Sin embargo, el hecho de que las emisiones crecieran más en los países que más crecieron hace que estos datos preliminares no sean suficientes para afirmar que las emisiones se han desacoplado del crecimiento. Además, en marzo se publicarán datos adicionales, desagregados por país.
La Agencia Internacional de la Energía difundirá en junio un informe especial, en el que analizará estrategias para recortar las emisiones relacionadas con la energía una tercera parte durante la próxima década.
El estancamiento de las emisiones procedentes de la generación de energía está en línea con lo adelantado hace unos meses por en el Presupuesto Global de Carbono. En ese momento, se supo que las emisiones procedentes de la quema de combustibles fósiles habían crecido un 0,6% en 2019, alcanzando un nuevo récord. Para revertir esa tendencia, Birol pidió que el sector del transporte y el industrial hagan esfuerzos análogos a los que, en su opinión, hace el sector de la energía.
Romper la tendencia al alza de las emisiones procedentes de la generación de energía no es, no obstante, suficiente para salir de la senda de la crisis climática. La concentración de gases de efecto invernadero sigue aumentando, y hacen falta reducciones drásticas de emisiones en todos los sectores. El modelo social y productivo actual es, según el IPCC, incompatible con dichas reducciones.