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La Clean Arctic Alliance (Alianza para un Ártico Limpio) ha criticado la decisión de la Organización Marítima Internacional (OMI) de aprobar el pasado viernes día 23 una prohibición plagada de lagunas en el uso y transporte de fuelóleo pesado (HFO) en el Ártico, argumentando que dejaría al Ártico, a sus comunidades indígenas y a sus ecosistemas ante el riesgo de un derrame de HFO durante otra década más.
El fuelóleo pesado (HFO) es un combustible fósil sucio y contaminante que alimenta el transporte marítimo en todos los océanos del mundo, y que representa el 80% del combustible marino utilizado en todo el mundo. Este combustible ya se prohibió en la Antártida en el pasado, debido a que si el HFO se derrama en las frías aguas polares, se descompone lentamente, resultando casi imposible de limpiar.
No hay que olvidar que a medida que el calentamiento global impulsa el derretimiento del hielo marino, más se amplían las zonas navegables en aguas del Ártico, lo que implica el aumento del tráfico y la entrada de buques aún de más tamaño en busca de tiempos de viaje más cortos.
La prohibición fue aprobada durante una reunión virtual del Comité de Protección del Medio Ambiente Marino de la OMI (MEPC 75), a pesar de la oposición generalizada de los grupos indígenas y las ONGs, al considerar que la aprobación de la prohibición con las características actuales es una aprobación sobre papel, lejos de tener un impacto real.
Según el Consejo Internacional para el Transporte Limpio (ICCT), en su redacción actual el reglamento aprobado el viernes sólo reducirá el uso de HFO en un 16% y el transporte de HFO como combustible en un 30% cuando entre en vigor en julio de 2024, y permitirá que el 74% del transporte marítimo en el Ártico siga funcionando como de costumbre. Entre julio de 2024 y julio de 2029, cuando la prohibición entre plenamente en vigor, es probable que la cantidad de HFO utilizada y transportada en el Ártico aumente a medida que se incremente el transporte marítimo en el Ártico.
Tal y como está aprobada la nueva normativa, cinco Estados costeros del Ártico central –Rusia, Noruega, Dinamarca (Groenlandia), Canadá y Estados Unidos– tendrán la opción de emitir excepciones de cumplimiento de la normativa a los buques que navegan bajo su bandera cuando operan en sus propias aguas.
La prohibición que la OMI ha aprobado significa que las tres cuartas partes de los buques que utilizan HFO hoy en día en el Ártico podrán acogerse a una exención a la prohibición, porque sus depósitos de combustible están ‘protegidos’ por un doble casco, o porque pueden solicitar a un estado costero del Ártico una excepción que les exima de cumplir la prohibición.
La Clean Arctic Alliance insta a los Estados miembros de la OMI a que consideren seriamente cómo puede reforzarse la prohibición antes de su adopción formal el año próximo, y a que los Estados individuales examinen las opciones nacionales para proporcionar la protección necesaria al Ártico frente a los riesgos del uso y transporte de HFO, como la reciente propuesta de Noruega de prohibir el HFO en las aguas que rodean Svalbard.
La decisión de la Organización Marítima Internacional es una enorme oportunidad perdida para proporcionar la protección que se necesita urgentemente para el Ártico y los pueblos indígenas que dependen de esas aguas. Peor aún, la aprobación actual de la prohibición causará inevitablemente una confusión generalizada, ya que el mundo en general supone que una prohibición significa poner fin al uso de HFO en el Ártico cuando, de hecho, la OMI ha establecido sólo una modesta y probable reducción temporal de su uso durante los primeros diez años. No podemos esperar diez años para detener el uso de HFO en el Ártico. Diez años es simplemente demasiado tiempo para esperar.
Marina Gros y Mónica Vidal son representantes de ECODES en la Clean Arctic Alliance
Las siguientes ONGes forman la Clean Arctic Alliance, que se ha comprometido a prohibir el HFO como combustible marino en el Ártico:
90 North Unit, The Altai Project, Alaska Wilderness League, Bellona, Clean Air Task Force, Green Transition Denmark, ECODES (Fundación Ecología y Desarrollo), Environmental Investigation Agency, European Climate Foundation, Friends of the Earth US, Greenpeace, Iceland Nature Conservation Association, International Climate Cryosphere Initiative, Nature And Biodiversity Conservation Union, Ocean Conservancy, Pacific Environment, Seas At Risk, Surfrider Foundation Europe, Stand.Earth, Transport & Environment y WWF.