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El cuarto capítulo del Manual del Consumo Anti-Emergencia Climática de Carro de Combate se centra en la alimentación. La agricultura es el quinto sector que más emisiones genera en España, con un 12 por ciento del total nacional. En el epígrafe se incluyen las actividades ganaderas, forestales y pesqueras. No obstante, los datos reflejan únicamente las emisiones resultantes de las actividades agrícolas dentro de España. Por ello, no es una radiografía fiel de la huella de nuestra alimentación, puesto que importamos buena parte de los alimentos que consumimos, mientras que exportamos productos como la carne de cerdo, el vino o el aceite de oliva.
Veamos algunos datos:
- Las actividades ganaderas son responsables del 66 por ciento de las emisiones del sector agrícola. Las emisiones de la ganadería han aumentado debido al aumento de las cabañas de vacuna y de porcino blanco [Fuente].
- Buena parte de la huella de los alimentos se debe a su transporte. En 2018, los principales alimentos importados en España fueron los moluscos, el maíz, los crustáceos, las habas de soja y el trigo [Fuente].
- El pescado, moluscos y crustáceos son los productos que más kilómetros recorren, con 6.406 kilómetros de media, según Amigos de la Tierra. Le sigue el café, té, cacao y especias con 6.001 kilómetros [Fuente].
- Hay controversia sobre las emisiones de la agricultura orgánica. Así, algunos estudios han apuntado a que puede tener un mayor impacto, puesto que requiere de mayor extensión de terreno. Sin embargo, un estudio de FAO aseguraba que la captura y secuestro de carbono de estos sistemas es mayor y que las emisiones de óxido de nitrógeno se reducen.
Los canales de distribución determinan en buena parte el tipo de alimentación que tenemos y la procedencia de los productos. Así, en los supermercados y grandes superficies es más fácil encontrar productos importados o producidos bajo modelos industriales.
En el lado opuesto, los grupos de consumo, los mercados de productores o los supermercados cooperativos suelen ofrecer productos ecológicos y de kilómetro cero. Recuerda que la legislación europea obliga a indicar en el etiquetado el país de origen de la mayor parte de los productos de alimentación, así que pídelo si no lo ves.
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El consumo de productos locales acarrea consigo unos beneficios. Éstos se reparten entre el consumidor, el vendedor local y el medio ambiente.
El consumidor porque adquiere unos productos de una calidad excelente.
El vendedor local porque da salida a sus productos y así obtiene beneficios que entre otras cosas irán a mejorar la producción del año siguiente.
El medio ambiente porque no se va a ver dañado ni por residuos de pomposos embalajes, desperdicios, emisiones de los medios de transporte y además no variará el paisaje natural.
Beneficios de consumir productos locales
Son más frescos
Sostenibilidad
Son productos de temporada
Conocemos de dónde vienen
Ayuda a la economía local
Lucha contra monopolios
Mejor precio
Reducen los desperdicios
Reducen el embalaje
Reducen las emisiones contaminantes
Conserva el paisaje natural
Promueve la cultura de la zona
Apoyo a pequeños emprendedores.
Y SOBRE TODO ES UNA ALTERNATIVA AL MONSTRUO CAPITALISTA.