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Los eventos meteorológicos extremos no solo ponen en riesgo la vida humana y animal, las infraestructuras, la salud y la seguridad alimentaria. También son un riesgo cada vez mayor para la economía. Esta es la principal conclusión de un nuevo estudio publicado por la Universidad de California en Davis. La investigación, publicada en la revista Nature Energy, revela que el sector de la energía puede ser el detonante de una nueva crisis global.
El sector, afirma el documento, no ha contabilizado correctamente el riesgo que suponen los efectos, cada vez más frecuentes, del calentamiento global. Si el mercado no tiene más en cuenta el clima, «podríamos ver una recesión como nunca antes», afirmó el autor principal de la investigación, Paul Griffin, profesor de contabilidad en la Escuela de Administración de Empresas de la universidad californiana.
Calor, huracanes y sequías
Por ejemplo, las temperaturas excesivas, pueden sobrecargar las redes y suponer cortes de electricidad en grandes áreas. Esto se vio el pasado otoño en California (Estados Unidos), cuando la eléctrica PG&E cortó el suministro a casi un millón de personas durante los incendios que afectaron al Estado. Los cortes también son habituales durante huracanes. Otros eventos como las sequías pueden suponer incrementos en el precio de la electricidad.
Pero la meteorología extrema no solo amenaza al suministro eléctrico, sino también a otros servicios, como la distribución de agua o el transporte. Esto, a su vez, afecta a la economía de familias, empresas e incluso ciudades y regiones. En ocasiones, estos impactos económicos pueden ser permanentes.
A pesar de «los obvios riesgos», los inversores y gestores no están incorporando esos riesgos de la crisis climática al precio de las empresas en el mercado, según el autor. «La pérdida de propiedades se lleva todos los titulares de prensa, pero ¿cómo afrontan las empresas [estos riesgos]? Las amenazas a las empresas pueden perturbar el sistema económico al completo», afirmó Griffin.
El cisne verde
El pasado mes de enero, el Banco de Pagos Internacionales (BIS en sus siglas en inglés) publicó un informe en el que evaluaba el riesgo que suponía el clima para el sistema económico. En el informe, el BIS (que actúa como una especie de banco para los bancos centrales) advertía de que la crisis de clima ya estaba en situación de provocar una nueva crisis económica a escala mundial. El titulo del informe, El Cisne Verde, hace referencia al cisne negro, concepto acuñado por el economista libanés Nassim Taleb, y que se refiere a eventos impredecibles con efectos significativos.
En el informe, el BIS advertía de que el cambio climático puede desencadenar «eventos extremadamente disruptivos» sobre el sistema financiero. Los eventos meteorológicos extremos se han multiplicado por cuatro desde principios de los años 80.
SIN BIODIVERSIDAD NO HAY VIDA.
La comunidad científica alerta de que actualmente un millón de especies se encuentran amenazadas de extinción. La destrucción de nuestros ecosistemas tiene consecuencias fatales para la supervivencia del planeta y la especie humana.
España es uno de los puntos calientes de biodiversidad más importantes del planeta y el territorio que más contribuye a la protección de ecosistemas dentro de la Unión Europea.
Se pone en marcha la campaña ‘Sin biodiversidad no hay vida’. Entre sus objetivos incluye concienciar sobre la importancia de la conservación de la biodiversidad a una sociedad civil que desconoce la magnitud del problema y reclamar al Gobierno español la adopción de medidas contundentes para actuar contra la pérdida de biodiversidad. Habrá una página web específica, una primera campaña en redes sociales que incluye un vídeo instando a la juventud a la movilización por la defensa de la biodiversidad y una exposición, que este año se expondrá en varias ciudades, tanto en espacios sociales como en centros escolares….
https://www.ecologistasenaccion.org/136546/campana-sin-biodiversidad-no-hay-vida/