Etiquetas:
Interés real, pura estrategia o un poco de cada. La histórica Compañía Española de Petróleos S. A. (Cepsa), nacida en 1929, ha anunciado que cambia su nombre por el de Moeve. “Un día histórico”, según su CEO, Maarten Wetselaar, para decirle al mundo que se están “transformando en otro tipo de organización, en la que la mayor parte de su beneficio provendrá de actividades sostenibles a final de esta década”.
En un comunicado, la petrolera señala que quiere convertirse “en uno de los referentes de la transición energética europea”. Este cambio, manifiestan, también responde al objetivo de acelerar su descarbonización y la de sus clientes, mediante una inversión de hasta 8.000 millones de euros.
El petróleo sigue muy presente en el negocio de Cepsa
El petróleo desaparece de su nombre, pero, de momento, no del negocio. En el último informe de gestión de la compañía muestran seis países en los que tienen activos de exploración, desarrollo y producción de petróleo y gas natural.
Participan en ellos, explican, “con diferentes roles: como operador o socio de operaciones conjuntas (joint venture)”. Estos países son Argelia (con tres campos de crudo y uno de gas natural), México (donde están en fase de renuncia) y Perú (un campo de crudo).
A estos que hay que añadir Colombia, con tres campos de crudo, en los que presumen de haber alcanzado “el hito de 100 millones de barriles de producción acumulada en Caracara (Colombia)”, destacan en el informe. Y Surinam, que es su primer descubrimiento en aguas profundas. La empresa que ahora anuncia su cambio de nombre tiene hoy una participación del 25% y todavía está en proceso de evaluación.
El cajón mental de los hidrocarburos
El estratega de marca, contenidos y narrativa, Fernando de Córdoba, ha publicado un hilo en X analizando este cambio de nombre de Cepsa a Moeve. El experto afirma que, “si han decidido ir a por un rebranding tan radical, es que sus datos les dicen que no hay manera de sacar a Cepsa del cajón mental de hidrocarburos. CLH también hizo algo parecido hace poco y ahora es Exolum”.
Se refiere también al cambio de color corporativo –del rojo al azul– y apunta lo siguiente: “Blue is the new green. Color de la categoría de movilidad eléctrica y menos gastado por el greenwashing”.
De Córdoba subraya que hay una “tendencia global a borrar referencias al gas o al petróleo de las marcas”, y se pregunta si no habrá más movimientos así en el futuro, con marcas como Repsol o BP.
La sexta empresa más contaminante de España
Cepsa (ahora Moeve) es propiedad de Mubadala Investment Company, un fondo de inversión soberano del Gobierno del Emirato de Abu Dabi. En 2023, con datos del Observatorio de Sostenibilidad, fue la sexta empresa que más dióxido de carbono emitió en España (3,8 millones de toneladas), solo por detrás de Repsol, Endesa, EDP, Naturgy y ArcelorMittal. De 2022 a 2023, reflejan en el mismo estudio, la compañía redujo sus emisiones en un 13,89%.
En 2023, Cepsa completó la venta de todos sus activos de exploración y producción en Abu Dabi (donde tenía licencia hasta 2058) a TotalEnergies, lo que representa el 50% de toda su producción de petróleo.
En declaraciones a Climática realizadas en ese momento, Cepsa defendió que, desde 2020, si bien “han realizado inversiones de mantenimiento y optimización en sus campos de producción para implementar medidas para aumentar su eficiencia y reducir sus emisiones”, no han iniciado producción de petróleo en nuevos contratos.
No obstante, la petrolera anunció en 2022 el hallazgo del yacimiento en Surinam, que sigue en fase de estudio.