Etiquetas:
Compromiso de «actualizar» el actual objetivo de reducción de emisiones de gases de efecto invernadero para la próxima década, pero sin especificar cuánto. Esta ha sido la conclusión a la que han llegado representantes de Medio Ambiente de los Estados miembros tras el encuentro que tuvo lugar el viernes en Luxemburgo. En total, han sido diez los países responsables de esta poca concreción.
Los delegados nacionales acordaron tras el encuentro un texto donde se confirma que el Consejo Europeo tendrá listo para finales de año un plan de trabajo para lograr emisiones neutras -es decir, no emitir más de lo que se puede absorber- para 2050. Sin embargo, las conclusiones sobre las metas para 2030 acabaron siendo descafeinadas y ambiguas.
En un primer borrador, la UE afirmaba que aumentaría las contribuciones determinadas a nivel nacional (NDC, por sus siglas en inglés) del 40% actual «de una manera que represente una progresión de ambición más allá de la actual y que refleje la mayor ambición posible de la UE». No obstante, esta parte fue eliminada de la versión final, pasando a señalar que «en 2020, la UE actualizará su NDC, tal y como se acordó en París».
Bulgaria, República Checa, Croacia, Estonia, Grecia, Hungría, Lituania, Malta, Polonia y Rumanía. Estos fueron los países responsables de que no se incluyera en el texto un lenguaje y unos compromisos más explícitos. De estos, tres -Polonia, República Checa y Hungría- son también los responsables de que la UE no haya podido establecer 2050 como fecha límite para lograr una economía neutra en emisiones. Estonia también era uno de los que se negaba, pero la semana pasada decidió cambiar de posición.
Estos obstáculos chocan frontalmente con las intenciones de la presidenta electa de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, quien tomará posición de su cargo el próximo 1 de noviembre. Como ya ha dicho en repetidas ocasiones, su objetivo es aumentar las contribuciones para el conjunto de la UE al 50%-55%, es decir, hasta 15 puntos más que los proyectados actualmente. Una medida que la propia ministra para la Transición Ecológica en funciones, Teresa Ribera, calificó en una entrevista para Climática de «ambición razonable».
Durante esta reunión del Consejo de Medio Ambiente, los 28 Estados decidieron la posición común de la UE de cara a la conferencia sobre cambio climático de la ONU (COP25) que tendrá lugar en diciembre en Santiago, Chile. En las conclusiones, la UE señala la «urgente necesidad de reforzar la acción mundial, sobre la firme adhesión de la UE al proceso multilateral y sobre las aspiraciones de la Unión».