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La derecha y la ultraderecha se abren paso en el Parlamento Europeo. Las elecciones europeas del pasado domingo hacen evidente la derechización que está viviendo Europa. El Partido Popular Europeo (PPE) ha conseguido el mayor número de escaños, 189, y se mantiene así como la primera fuerza comunitaria. Por detrás, resiste la Alianza de los Socialistas y Demócratas europeos (S&D) pese a perder 15 eurodiputados, con 135.
«Mientras intentamos dar sentido a estos complejos resultados de las elecciones de la UE, los partidos populistas han ganado desgraciadamente demasiado terreno, y sólo unas políticas más justas y escuchar siempre más y mejor a los ciudadanos son la solución a la polarización. Me niego a ceder al fatalismo», señala Laurence Tubiana, directora de la European Climate Foundation y una de las arquitectas del Acuerdo de París.
La familia política de Los Verdes/Alianza Libre Europea, que lleva la defensa del medioambiente por bandera, ha tenido el segundo peor resultado de la noche en comparación con los comicios pasados: ha pasado de 74 a 52 escaños de unas elecciones a otras, bajando del cuarto al sexto puesto.
En las elecciones de 2019, Los Verdes gozaron de su mejor resultado en la Eurocámara. Pero ahora se enfrentan a una tendencia negacionista y retardista debido al auge de la derecha y la extrema derecha, contrarios a la Agenda 2030 y a la lucha contra el cambio climático. Así, se han visto superados por el Grupo de los Conservadores y Reformistas Europeos –al que pertenece VOX–, que ha obtenido 73 escaños, y por el Grupo Identidad y Democracia (58).
En el caso de España, los partidos que se adhieren al bloque ecologista son Sumar y Esquerra Republicana de Catalunya (ERC), que han conseguido 3 escaños cada uno (el último partido como parte de la coalición Ahora Repúblicas). De los seis, cuatro irán a Los Verdes.
El Partido Popular ha logrado sacar 22 escaños, dos más que el PSOE. Con este resultado, los socialistas españoles (con 20 escaños) serán los líderes de los Socialistas Europeos (tras los 14 del Partido Socialdemócrata de Alemania). En cuanto al Partido Popular (PP), será el segundo partido mayoritario dentro de los conservadores tras CDU/CSU de Alemania, que ha obtenido 31 escaños.
Como novedad, ha emergido con 3 eurodiputados y el 6,21% de los votos una nueva formación, Se acabó la fiesta, de corte populista de ultraderecha. «Llama la atención que esta formación ha obtenido mejores resultados en territorios con mayor número de conflictos relacionados con la migración y la transición ecológica. El resultado puede suponer un cuestionamiento de las políticas ambientales, si bien eso dependerá de las posiciones que los conservadores del Partido Popular adquieran, en la medida que se dejen arrastrar por las políticas contrarias a las sostenibilidad por parte de la ultraderecha”, apunta Cristina Monge, politóloga y presidenta de la asociación Más democracia.
Y «aunque VOX aumenta sus escaños a 6 respecto a 2019, su porcentaje de voto ayer (9,6%) está muy por debajo del 12,38% que obtuvo en las generales de julio de 2023 y de su máximo histórico del 15% en las generales de noviembre de 2019», apunta José Ignacio Torreblanca, director del Consejo Europeo de Relaciones Exteriores en Madrid.
En Alemania, donde Los Verdes forman parte de la coalición del Gobierno, los resultados electorales también han sido decepcionantes para el grupo político: han pasado de obtener 25 eurodiputados a tener 16. Y lo mismo en Francia, donde han perdido más de la mitad de sus escaños para quedarse con cinco.
Algo mejor ha ido en los Países Bajos, donde la alianza ha conseguido mantener los nueve escaños. En Italia, en cambio, la ultraderecha ha vencido con Giorgia Meloni. La coalición verde ha obtenido seis escaños, cinco más que en las anteriores elecciones.
En los últimos cinco años, Europa ha sido testigo de cómo el PPE se oponía a la Ley de Restauración de la Naturaleza, aprobaba nuevos proyectos de combustibles fósiles y cedía a la presión del sector ganadero y agrícola, con el que tiene una estrecha relación.
Desde la Fundación Renovables urgen a los partidos a alcanzar acuerdos que garanticen estabilidad y avances en las políticas energéticas, industriales y ambientales de Europa. «Es necesario, además, que en esta legislatura se afronten debates cruciales para Europa, como la creación de una Política Energética Común que permita elevar la soberanía de los países en esta materia y avanzar hacia la erradicación de los combustibles fósiles», reclaman.
Tras las elecciones, ahora queda por ver cómo se conformará el nuevo Gobierno comunitario. Lo más seguro es que Úrsula von der Leyen (PPE) continúe otro lustro al frente de una Comisión Europea donde podría entrar Teresa Ribera como máxima responsable de cuestiones como clima, energía o medioambiente.
En algún comentario he leído que la gente vota a los políticos que se les parecen. Es verdad.
No echar la culpa a los políticos sino a las masas desinformadas, manipuladas y borreguiles que les votan.
Qué habré hecho yo para merecer ésto.
La UE es una marioneta USA. Lo que USA le dicte. Europeos y norteamericanos repiten como loritos que somos la democracia porque así lo dice la dictadura más genocida de todas las dictaduras: la dictadura del capital.
La nefasta von der Leyen no es más que una servil sirvienta de esta dictadura. Ya le viene de familia, su padre o su abuelo era un colaborador nazi. El capital sabe elegir a los mejores sirvientes.
Por las noticias que tengo ¿no son los verdes alemanes medio nazis? pues hay que alegrase de sus malos resultados.
La mayoría de la gente que vota a la ultraderecha lo hace por el tema de la inmigración y la transición ecológica. No se a que viene extrañarse a estas alturas.
Es el capitalismo, el dueño y señor del mundo, quien manipula, adormece, atonta y dicta.
SOCIALISMO O BARBARIE, a ver como se puede hacer entender. Nos va la vida en ello.
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Desde Ecologistas en Acción, el Centro Delàs de Estudios por la Paz y Extinction Rebellion estamos articulando la campaña Descarbonizar es Desmilitarizar, para denunciar y visibilizar las emisiones de GEI del sector militar, así como los discursos de securitización basados en el contexto de emergencia ecológica.
Se estima que las emisiones de GEI del sector militar (fuerzas armadas e industria militar), representan el 5,5% de las emisiones mundiales, similares a las emisiones de la aviación comercial.
El manifiesto se presentará públicamente el 13 de junio. Se recogen adhesiones de colectivos y grupos locales hasta el 12 junio.
Faltaba el postre: La Eurocopa.
A tan solo diez días del inicio de la competición en Alemania, una coalición de 18 organizaciones europeas unidas bajo la campaña Travel Smart y liderada por la organización Transport&Environment, pone el foco sobre las emisiones asociadas a los desplazamientos en el marco del torneo. Según las estimaciones de la organización alemana Oeko, el transporte de equipos y aficionados representará el 80 % de las emisiones totales del campeonato, de un mes de duración.
En su estudio, Transport&Environment ha cuantificado las emisiones de las diferentes selecciones teniendo en cuenta tres tipos de desplazamiento: los viajes desde el país de origen al lugar de concentración; los trayectos que serán realizados por cada combinado durante la fase de grupos; los desplazamientos hasta la final de las seis selecciones (España, Francia Inglaterra, Bélgica, Alemania e Italia) con mayor probabilidad de alcanzar dicho encuentro.
Así, en caso de utilizar exclusivamente el avión para sus desplazamientos hasta la fase de grupos, las 24 selecciones participantes podrían emitir hasta 1.900 toneladas de CO2, una cantidad equivalente 200 veces superior a la huella de carbono de un ciudadano de la UE. Sin embargo, esa cifra podría ser reducida en un 57 % si las selecciones decidieran sustituir el avión por viajes en tren o autobús para aquellos viajes de una duración de hasta ocho horas por vía terrestre.
Por otro lado, según el estudio, las selecciones con origen en los países fronterizos con el país organizador podrían reducir las emisiones de sus viajes hasta sus lugares de concentración entre un 94 % y un 98 % en caso de sustituir el avión por el tren o el autobús. Adicionalmente, las emisiones derivadas de la participación en la fase de grupos del conjunto de selecciones serían un 95 % menores en caso de efectuar sus desplazamientos por medios terrestres.