Habrá mascletá en Madrid Río: la jueza da vía libre para el espectáculo de 300 kilos de pólvora 

El espectáculo pirotécnico sigue adelante a pesar del recurso presentado por la protectora Salvando Peludos, que denunciaba el peligro que representa para la fauna del lugar. La magistrada, sin entrar en el fondo de la cuestión, considera que no se había agotado la vía administrativa.
Puente del Rey, ubicado en Madrid Río, albergará la mascletá. Foto: Ayuntamiento de Madrid.

La mascletá madrileña sigue adelante, ahora con el visto bueno de la justicia. Este viernes, la jueza del Juzgado de lo Contencioso Administrativo número 8 ha decidido no suspender el espectáculo pirotécnico en Madrid Río, en contra de lo que pedía la protectora Salvando Peludos, que alega que afectará a la fauna del lugar. La magistrada Berta María Gosalbez, titular del juzgado, ha tomado la decisión al considerar que no se había agotado la vía administrativa.

El evento se desarrollará en el puente del Rey, situado sobre el renaturalizado río Manzanares y junto a los jardines del Campo del Moro y Casa de Campo, espacios con una alta presencia de aves, muchas de ellas amenazadas.

A principios de semanas, la protectora, a través del despacho de abogados Derechos y Animales, pidió medidas cautelares para suspender el evento. Aun así, también estaban abiertos a que se cambiara de ubicación.

“Lamentamos profundamente la decisión que ha tomado el juzgado, al no querer entrar en el fondo del asunto por alegar que no se ha finalizado la vía administrativa”, señalan la protectora y el equipo legal en un comunicado conjunto. Cuentan que están estudiando la posibilidad de recurrir la resolución judicial al entender “que en este caso, es la propia administración local la que ha incumplido los procedimientos administrativos”. “No se puede alegar lo que no existe”, denuncian. Aun así, aseguran estar “satisfechos” por la respuesta ciudadana en la defensa de “la protección de los animales y de los ecosistemas”.

Horas antes de que se conociera la postura de la justicia, la Delegación del Gobierno dio el visto bueno para el evento. No obstante, advertía de que su autorización se limitaba al uso de explosivos y a la seguridad ciudadana, y que no eximía “de la necesidad de otras autorizaciones, como pueden ser medioambientales, patrimoniales, de ordenanzas municipales, etc”.

El espectáculo, que nace de una promesa electoral durante las pasadas elecciones municipales, se enmarca en un acuerdo de promoción turística entre el Ayuntamiento de Valencia y el de Madrid (ambos gobernados por el Partido Popular). En esta ocasión, el objetivo es difundir las Fallas, declarada Patrimonio cultural inmaterial por la Unesco.

Aunque la mascletá estaba anunciada por el alcalde José Luis Martínez-Almeida desde verano, el martes 13 de febrero (a cuatro días del acto) todavía no había expediente administrativo del evento, es decir, no estaban cerrados los permisos, ni el informe medioambiental y económico, ni el contrato, como confesaba Ángel Martín Vizcaíno, gerente de Madrid Destino (empresa pública municipal encargada de la organización), en una carta respuesta a una solicitud de información del concejal de Más Madrid Eduardo Fernández Rubiño.

El jueves, en medio de todo el revuelo, se hizo público el expediente de la mascletá a través de la Plataforma de Contratación del Sector Público. El documento solo incluye el coste de la pirotécnica, adjudicada a Pirotecnia Valenciana, S.L por 45.980 euros. El objeto del acuerdo, fechado a 14 de febrero, incluye los “servicios de diseño, creación, producción, transporte, instalación, montaje, disparo y posterior desmontaje del espectáculo pirotécnico”. No obstante, al ser una sociedad municipal la adjudicataria y no directamente el Ayuntamiento, se desconoce el resto de documentos, como el de impacto ambiental.

En total, se dispararán más de 300 kilos de pólvora, lo que puede afectar a la biodiversidad presente en el río y sus inmediaciones. Por la época del año, algunas aves ya han iniciado su reproducción o se preparan para ello. Otras están en proceso migratorio o de hibernación, por lo que el ruido de la mascletá les haría perder energía, desorientarse, abandonar la puesta e incluso morir, como han alertado diversos especialistas. Asimismo, muchas de las aves están en listados de protección especial y en catálogos de especies amenazadas.

A finales del año pasado, un estudio publicado en la revista científica Frontiers in Ecology and the Environment concluía que la media de aves que se detectan en vuelo tras los fuegos artificiales de Nochevieja es 1.000 veces mayor que en otras noches. La intensidad de la pirotécnica, acorde a la investigación, era mayor en los primeros cinco kilómetros, si bien la actividad vuelo seguía siendo diez veces mayor hasta los 10 kilómetros de distancia.

Otro estudio, hecho en Valencia en 2021, señalaba que la contaminación acústica asociada a celebraciones festivas con espectáculos de fuegos y petardos redujo la productividad del gorrión común, especie escogida para la investigación.

En la zona donde se celebrará la mascletá madrileña se han llegado a avistar cerca de 130 especies diferentes de aves según la aplicación eBird, si bien sobre esta época rondan las 40-50 especies, apunta Yago Martínez, de Ecologistas en Acción Madrid.

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COMENTARIOS

  1. En lugar de invertir en La Cañada Real, en la conservación del medio ambiente, lo suyo es entretener y distraer y sobre todo que la gente no piense y que consuma.
    Para eso les paga el sistema capitalista al que con tanto entusiasmo sirven.

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