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La organización ARDE (Animal Respect and Defence for the Environment) ha logrado grabar en vídeo a empleados de una granja portuguesa propiedad del Grupo Lusiaves golpeando de forma indiscriminada a los pollos. Este gigante del sector avícola es uno de los proveedores de los supermercados de la marca española Mercadona y cuenta con 466 instalaciones certificadas en todas las fases productivas por el sello catalán de bienestar animal Welfair.
El certificado internacional Welfair busca garantizar buenas prácticas en bienestar animal respetuosas y sostenibles. Está gestionado por el Instituto de Investigación y Tecnología Agroalimentarias (IRTA) –perteneciente a la Generalitat de Catalunya– en colaboración con el Instituto Vasco de Investigación y Desarrollo Agrario (NEIKER-Tecnalia).
El vídeo difundido por ARDE se grabó en noviembre de 2024 en la granja de Lusiaves Quinta dos Matinhos, ubicada en la localidad de Marinha das Ondas, en el condado de Figueira da Foz, perteneciente al distrito de Coimbra. En el momento del traslado de los pollos, una cámara oculta grabó lo que los activistas han dado a conocer como “la masacre de Coimbra’: el toro mecánico del camión aplasta a decenas de pollos. Los operarios dejan a centenares de aves sin cargar, de las que se deshacen otros operarios de manera extremadamente cruel: durante horas, los golpean con varas hasta su muerte.
Las imágenes de lo ocurrido fueron grabadas por un informante que ha colaborado con la asociación animalista. Horas después, al caer la noche, sus consecuencias aún eran visibles. En el lugar quedaron aves decapitadas, con los globos oculares fuera de sus órbitas o con las vísceras esparcidas por el suelo. Los pocos animales que habían logrado sobrevivir a los golpes se tambaleaban, moribundos, y empapados en sangre. “Uno de ellos, que nunca podré olvidar, tenía el pico entreabierto, intentaba piar, pero sólo emitía un leve gemido y tenía la cabeza cubierta de sangre”, ha declarado el informante.
Desde Welfair sostienen que fueron conocedores de las imágenes el miércoles después de que Climática se las enviara. Al día siguiente, fuentes del organismo confirmaronn que habían mandado a un equipo a la granja implicada para realizar una inspección por sorpresa. Una vez allí, aseguran que los responsables de la instalación se mostraron colaborativos. En el momento de publicar este artículo, la investigación interna continúa.


De Coimbra a toda España
La explotación ganadera en la que se grabaron las imágenes está compuesta por dos naves y pertenece a Grupo Lusiaves, el productor avícola más importante de Portugal, uno de los encargados de abastecer pollos a establecimientos de Mercadona repartidos por todo el territorio español. En concreto, es el proveedor –bajo su principal marca, Lusiaves– de la referencia de los productos congelados «Cuartos traseros de pollo«, en el caso de la península, y de ‘solomillos de pollo’, en el de las islas Canarias.
Contactados por Climática, desde Mercadona confirman que Lusiaves es uno de sus 31 proveedores de pollo y que “todas sus granjas” están “certificadas por Welfair Quality”. La cadena de supermercados de Juan Roig rechaza “cualquier práctica de abuso y maltrato”, y señala que la empresa proveedora le “sirve en España una referencia de cuarto trasero de pollo congelado que no trabaja en ninguna granja de Coimbra”.
Sin embargo, el código de control europeo que tienen todas las bolsas de pollo congelado que vende Mercadona certifica que el suministrado por Lusiaves proviene de su centro de sacrificio y procesamiento de aves de corral situado en Marinha das Ondas (Coimbra), la misma localidad donde se ubican varias de las granjas que tiene esta compañía en la zona, y a menos de 10 minutos de donde se grabaron las imágenes de maltrato animal.

Tras recibir un correo electrónico de Climática con imágenes del vídeo, el Grupo Lusiaves contestó condenando “cualquier comportamiento que viole las normas de bienestar animal” e incluyendo un comunicado en el que ponen en valor su compromiso en bienestar animal y remarcando que poseen el sello Welfair, cuya “certificación se basa en los más exigentes protocolos europeos”. Sin embargo, alegaron que no podían entrar en detalles al no tener el vídeo. A continuación, este medio le mandó la grabación, de 4 minutos, pero no volvieron a contestar.
El sello Welfair se vio envuelto en una polémica similar en diciembre de 2023, cuando fue foco de críticas tras la denuncia de una explotación porcina de Burgos. Fue entonces cuando IRTA, la entidad catalana creadora del sello, decidió incluir un 20% de auditorías sorpresa para incrementar el control sobre las granjas que llevan su certificación.
Violencia “sistémica”
La ONG portuguesa Frente Animal, especializada en bienestar avícola, ha denunciado los hechos ante la Fiscalía de Coimbra, la Guardia Nacional Republicana y la Policía de Seguridad Pública, exigiendo que se investigue el caso y se tomen medidas contra los responsables. Los operarios de la granja avícola podrían estar incurriendo en presuntos delitos de maltrato animal bajo los artículos 387 y 388 del Código Penal portugués. También podrían estar vulnerando la normativa específica sobre ganadería.
En palabras de Julia Elizalde, portavoz de ARDE, “la masacre de Coimbra es uno de los casos más severos de maltrato animal documentados hasta el momento. Los operarios tratan a los pollos con absoluto desprecio”. Según denuncia Elizalde, “este no es un caso aislado: la violencia hacia los animales por parte de la industria cárnica es sistemática”.
Desde ARDE exigen a los supermercados españoles “que dejen de engañar a los consumidores para tapar las vergüenzas de la industria cárnica». En este sentido, les piden que eliminen las imágenes de animales felices de sus envases cárnicos y pongan fin al uso de sellos de bienestar animal. «El sistema alimentario necesita un cambio de rumbo, demandamos un aumento de la oferta vegetal en beneficio de los animales, nuestra salud y el planeta”, concluye.
La organización pone como ejemplo las políticas que se han seguido en otros países europeos. En Países Bajos, once supermercados, que suman el 90% de las ventas nacionales, se comprometieron a aumentar el porcentaje de sus ventas de proteínas de origen vegetal del 40% actual al 60% en 2030. En Alemania, cuatro supermercados líderes redujeron el precio de los sustitutos vegetales para igualarlo al de la carne.
La cadena Lidl ha declarado que las ventas de los productos vegetales aumentaron un 30% tras recortar los precios y colocar la carne vegetal junto a la animal. Todo ello lleva, según recuerdan desde ARDE, a que “una cesta vegetal de la compra sea más barata que su equivalente en productos cárnicos”.
* Eduardo Robaina ha colaborado en la elaboración de este artículo.
* Horas después de la publicación del artículo, Grupo Lusiaves ha remitido un segundo comunicado a Climática. Tras visionar un vídeo resumen de cuatro minutos facilitado por este medio, aseguran que «las imágenes son absolutamente estremecedoras y merecen nuestro total repudio y condena». Si bien admiten que algunas de las imágenes del vídeo pueden proceder de explotaciones bajo su responsabilidad, consideran que otras no.
En su escrito, Grupo Lusiaves asegura no tener «conocimiento de ningún acto que constituya maltrato de animales en sus instalaciones» y vuelven a remitir al sello Welfair como muestra de su compromiso con el bienestar animal. Asimismo, consideran que «el vídeo en cuestión procede de una asociación española» y «llega justo una semana después de que se conociera en España la noticia de que el Grupo Lusiaves está negociando la adquisición de uno de los mayores grupos avícolas españoles».
Aun así, confirman que han iniciado «una investigación interna», y en caso de que se demuestre que «ha habido falta de respeto por el bienestar animal por parte de alguno de los empleados o proveedores de servicios del Grupo», se iniciarán «inmediatamente los procedimientos disciplinarios pertinentes y todas las medidas necesarias». De forma paralela, dicen que van a «reforzar la formación de todos los empleados, prestadores de servicios y proveedores, así como a reforzar los mecanismos de vigilancia dentro de las unidades para garantizar un control más eficaz del cumplimiento de las normas».
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Pero el camino no termina aquí. Ahora, el Congreso debe debatir nuestra propuesta, y no podemos permitir que el silencio o la indiferencia apaguen este clamor. Necesitamos mantener vivo el debate, en las calles y en los medios, hasta que el último toro deje de sangrar en un ruedo.
Este año es crucial. Por eso, lanzaremos una gira antitaurina sin precedentes: acciones de alto impacto y protestas mediáticas en las fiestas mayores donde más se promociona la tauromaquia. Empezaremos en las Fallas de Valencia y en la feria de San Jorge de Zaragoza, seguiremos en Sanfermines de Pamplona, San Isidro de Madrid, Hogueras en Alicante, Aste Nagusia de Bilbao, San Mateo en Logroño, fiestas del Pilar en Zaragoza… y llegaremos hasta donde los recursos nos permitan, con fortuna hasta en la Feria de Abril en Sevilla y en otros territorios.
Imagina: activistas con mensajes contundentes, performances creativas, acciones de alto impacto para que la prensa llene titulares. Queremos que ningún diputado pueda eludir su responsabilidad cuando llegue el momento de votar.
Este año, queremos multiplicar el eco de la lucha antitaurina. Pero para ello, necesitamos recursos urgentes: materiales para las protestas, carteles, desplazamientos, equipos audiovisuales, difusión y llamamiento de voluntariado. Cada euro suma para que nuestro mensaje antitaurino resuene más fuerte que los aplausos en una plaza.
El momento es ahora. Las fiestas donde actuaremos son escaparates de una tradición violenta, pero también oportunidades únicas para confrontar a la sociedad con la realidad: los toros no son patrimonio, son víctimas. Con tu ayuda, llevaremos pancartas gigantes, repartiremos información, realizaremos acciones que duelan en el corazón… y sobre todo, obligaremos a los políticos a tomar posición.
No nos conformamos con sólo firmas. Queremos leyes. Y para lograrlo, debemos estar presentes donde más les duele: en las calles durante sus fiestas taurinas más importantes y en el debate público. Pero sin tu apoyo, esto no será posible. ¿Imaginas que en 2025 el Congreso escuche por fin el rugido de la sociedad que pide abolir la tauromaquia? Ese futuro está cerca, pero solo si seguimos empujando, juntos.
Te pido que, con la misma generosidad que firmaste la ILP, contribuyas hoy a financiar esta gira. Cada protesta, cada cartel, cada grito en defensa de los toros depende de personas como tú.
¿Nos ayudas a convertir a la tauromaquia en una pesadilla del pasado?
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