Europa: inundada y acalorada en 2023

2023 fue el año más cálido desde que hay registros según algunos datos recogidos en el último informe del Servicio de Cambio Climático de Copernicus y la Organización Meteorológica Mundial. En algunas zonas del continente, las precipitaciones también se situaron muy por encima de la media.
Europa: inundada y acalorada en 2023
Personas bebiendo de una de las fuentes situadas en Las Ramblas de Barcelona. Foto: Ajuntament de Barcelona.

Supimos que 2022 fue, para Europa, un año en que se registraron niveles récord de sequía y calor. También sabemos desde hace tiempo que es el continente que más rápido se calienta, el doble que la media mundial. Con estos apuntes, no es de extrañar que 2023, según indicaban recientemente el Servicio de Cambio Climático de Copernicus (C3S) y la Organización Meteorológica Mundial (OMM), haya sido, en su conjunto, el año más cálido (o el segundo más cálido, según el conjunto de datos que se analice) desde que hay registros, con temperaturas que superaron la media durante 11 meses.

Un mes en especial, septiembre, fue el septiembre más cálido desde que se tienen datos. Asimismo, en 2023 se registró un récord de días con «estrés térmico extremo». Además, los días en una categoría todavía superior, con «fuerte estrés térmico», tienen una tendencia más elevada en toda Europa.

Esto ha provocado que la mortalidad relacionada con el calor haya aumentado alrededor de un 30% en los últimos 20 años, una cifra que se calcula que incrementará en el 94% de las regiones europeas estudiadas en los próximos años. Un estudio publicado en Nature Communication señalaba en agosto del año pasado que la mortalidad por calor extremo se duplicaría en un mundo 2 °C más caliente.

«Los efectos directos e indirectos del calor en la salud humana son devastadores en casi toda la región, especialmente en España y en los núcleos urbanos europeos, aunque la percepción del riesgo sigue siendo baja», afirma Anna Cabré, científica del clima asociada a la Universidad de Pensilvania (Estados Unidos), para Science Media Centre España.

Un año de extremos

El calor no es el único fenómeno que afectó a Europa durante el año pasado. El informe detalla que, a lo largo de 2023, se perdieron 63 vidas por borrascas, 44 por inundaciones y otras 44 por incendios forestales. Las pérdidas económicas relacionadas con la meteorología y el clima, por otro lado, superaron los 13.400 millones de euros.

El verano, sobre todo, fue una época de contrastes: aunque no fue el más cálido registrado, se dieron condiciones que, en ocasiones, llegaron a ser extremas, con variaciones apreciables de temperatura y precipitaciones en todo el continente y entre un mes y otro.

«En el noroeste de Europa se registró el mes de junio más cálido desde que hay registros, mientras que en las zonas del Mediterráneo las precipitaciones se situaron muy por encima de la media. En julio, este patrón prácticamente se invirtió. En agosto, el sur de Europa registró temperaturas superiores a la media y septiembre fue el más cálido registrado en el conjunto de Europa. Gran parte de Europa se vio afectada por olas de calor durante el largo verano, y tanto en agosto como en septiembre se produjeron graves inundaciones», explica la publicación.

La sequía que padece ahora parte del continente, y que tiene una especial incidencia en España, contrasta con el tercio de la red fluvial europea que vio durante 2023 cómo los caudales de los ríos superaban el umbral de inundación «alta». Un 16% incluso superó el umbral de inundación «grave». En las principales cuencas fluviales, como las del Loira, el Rin o el Danubio, se registraron caudales récord o casi récord debido a una serie de tormentas entre octubre y diciembre.

En su conjunto, Europa registró alrededor de un 7% más de precipitaciones que la media. En total, las inundaciones ocurridas afectaron a 1,6 millones de personas en el continente y provocaron alrededor del 81% de las pérdidas económicas del año debidas a los efectos del clima.

Menos hielo, más calor marino

Los océanos también están sufriendo cada vez más calor. En el conjunto del año, la temperatura media de la superficie del mar en los océanos europeos fue la más alta desde que hay registros. Ocurrió lo mismo para algunas zonas del mar Mediterráneo y del noreste del océano Atlántico.

Por otro lado, el número de días de nieve en el continente durante el año pasado fue inferior a la media, sobre todo en Europa central y en los Alpes durante el invierno y la primavera. El informe tacha el deshielo de 2023 como «excepcional» en los glaciares alpinos. Allí, el hielo ha perdido alrededor del 10% del volumen que le quedaba en 2022 y 2023.

En el Ártico, el año fue el sexto más cálido registrado para la región en su conjunto. La extensión del hielo marino ártico se mantuvo por debajo de la media durante la mayor parte de 2023: en su máximo anual, en marzo, la extensión mensual se situó un 4% por debajo de la media, ocupando el quinto lugar entre las más bajas registradas; y, en su mínimo anual de septiembre, la extensión mensual fue la sexta más baja, un 18% por debajo de la media.

Asimismo, las emisiones totales de carbono de los incendios forestales de las regiones subártica y ártica fueron las segundas más altas registradas. La mayoría de los incendios forestales en latitudes altas se produjeron en Canadá entre mayo y septiembre.

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  1. Los bosques de los Cárpatos, donde encontramos vínculos entre siete proveedores de IKEA y la destrucción de bosques primarios, albergan la mayor superficie de bosques primarios de Europa fuera de Escandinavia y la Taiga rusa. Los bosques maduros y otros bosques de alto valor de conservación desempeñan un papel crucial en la lucha mundial contra la crisis climática y son vitales para la salud del planeta. Y tenemos que protegerlos.
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    Gracias por firmar nuestra carta abierta a IKEA:
    https://savecarpathians.org/?utm_campaign=food-and-forests&utm_source=hs-email&utm_medium=email&utm_content=ikea-signers&utm_term=followup-email-20240422

  2. Ecologia o Saharització? (La Ribera en bici)
    La Ribera valenciana encadena 13 mesos seguits amb temperatures més altes del normal i durant aquest mig any hidrològic, que començà l’1 d’octubre, al PV les temperatures han estat 2’2ºC per damunt les mitjanes, ha plogut un 69% menys del normal i la CHX ha declarat sequera extraordinària. A més, segons l’Aemet, l’aridesa avança en Espanya uns 1.500 km²/any des de mitjans del segle XX, de manera que el 75% del territori, La Ribera inclosa, està amenaçat de saharització. Paral·lelament, els problemes climàtics reduïxen i encarixen la producció d’aliments, i en algunes províncies com Alacant hem tingut pèrdues del 90% en la producció de cereals…
    La causa principal són els gasos d’efecte hivernacle que llancem a l’atmosfera en cremar tantíssims combustibles fòssils i boscos, sobretot el CO2 del qual hi havia 280 ppm al segle XVIII i ara fins a 426 ppm… Els científics de l’IPCC calculen que encara som a temps de limitar la pujada de temperatures global a 1’5ºC, contenint els danys a uns nivells relativament assumibles, si reduïm la crema de combustibles a la meitat durant esta dècada i protegim els ecosistemes vitals.
    I el sector que més CO2 emet és el transport, un 30% ací, per tant és urgent reduir-lo i tècnicament és fàcil, sols cal deixar de dopar el transport motoritzat i fomentar la proximitat, viatjar menys, consumir productes locals i ecològics, menys carn, moure’ns a peu, en bici i transport públic, estalviar materials i energia, etc. El problema és la inèrcia social, la influència tòxica de les grans companyies i la complicitat dels governs.
    Si no canviem, òbviament seran xiquets i joves els qui més ho patiran, amb l’agreujant que quan ells siguen adults ja no podran fer res perquè la situació serà irreversible, accelerada, pels fenòmens de retroalimentació en marxa: fusió de neus, gels i tundra, acidificació dels oceans, alteració dels corrents oceàniques, … És ara o mai, som l’última generació que encara pot resoldre l’emergència climàtica, per tant els que volem als nostres menuts hauríem de fer tot el possible per realitzar els canvis necessaris.

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